Parasitosis

Las parasitosis son infecciones intestinales causadas por varios tipos de lombrices. La forma más común de contraer una parasitosis es tomando agua o alimentos contaminados.

Cuando el niño tiene lombrices, puede quejarse de dolor de barriga, cólicos, náuseas y presentar vómitos, diarrea, pérdida de peso, anemia y fiebre. Si la parasitosis no se trata, puede causar complicaciones, pues los parásitos impiden que el cuerpo aproveche los nutrientes de los alimentos, dejando al niño más vulnerable a infecciones y anemia por falta de hierro.

Para prevenir la aparición de la parasitosis en el bebé, es necesario cuidar la higiene personal, de la casa y de los alimentos. También es importante que la comunidad luche por condiciones adecuadas de saneamiento básico y un servicio de salud de calidad.

Cuando el bebé tiene síntomas de parasitosis, la familia debe llevarlo al servicio de salud para recibir el tratamiento adecuado.

[Você está aqui:]
[Você está aqui:]